lunes, 14 de enero de 2013

Cerca de 31 mil policías laboran en 1,397 comisarías en el Perú

Lunes 14 de enero del 2013 | 16:43

Según I Censo Nacional de Comisarías realizado por el INEI, la mayoría de las dependencias policiales cuentan con 30 a 60 efectivos, su área de trabajo está en 401 distritos y la población que cada una tiene a cargo fluctúa entre 20 mil y 40 mil personas.

(USI)
(USI)

En el país existen 1,397 comisarías de las que el 88.2% son del tipo básico, es decir que ofrecen servicios directos a la ciudadanía, según el I Censo Nacional de Comisarías que realizó el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
En total hay 1,232 comisarías básicas que realizan patrullaje, motorizado y a pie, investigación de delitos y faltas, violencia familiar, accidentes de tránsito y coordinación con la comunidad para desarrollar acciones de seguridad ciudadana, entre otras funciones.
El resto, es decir, 165 comisarías, son las denominadas especializadas, pues realizan sus labores en aeropuertos, carreteras, turismo y en protección a la mujer y la familia.
Alejandro Vílchez, jefe del INEI, dijo que este censo se efectuó durante junio, julio y agosto de 2012 y permitió conocer el número de efectivos, población asignada y área construida de las comisarías básicas, factores por los que estos inmuebles han sido categorizados.
Así, explicó el representante, las consideradas tipo A son 127 comisarías ubicadas en 109 distritos. Cada una tiene una población asignada entre 60,000 y 80,000 habitantes, y entre 120 y 240 agentes policiales.
Las del tipo B son 311 comisarías que cubren 253 distritos y tienen una cobertura de entre 40,000 y 80,000 habitantes, y entre 60 y 120 efectivos.
En tanto, la mayor parte de las comisarías se encuentra en la categoría C, pues cuentan con 30 a 60 efectivos, su área de trabajo se ubica en 401 distritos y la población que cada una tiene a cargo fluctúa entre 20,000 y 40,000 personas.
El estudio también dio a conocer la relación que tienen estas dependencias policiales con el Estado. Los resultados muestran que el Ministerio del Interior es propietario de los inmuebles donde funcionan 914 comisarías, de ellos solo 384 tienen título de propiedad. El resto está en proceso de trámite o iniciando el mismo.
Otras comisarías operan en locales alquilados (22) o cedidos (384), mientras que 77 están incluidas dentro del rubro “otros”, en que se consideran los inmuebles confiscados al narcotráfico.
En cuanto a los vehículos con que cuentan los locales policiales, el censo identificó 3,516, entre automóviles, camionetas, motos, lanchas y bicicletas, de los que el 92% está en condición operativa. Asimismo, de los 4,345 equipos de comunicación como teléfonos fijos, móviles, radios portátiles, equipos de radio y fax, el 82% se halla operativo.
La investigación registró también la existencia de 9,047 equipos informáticos (computadoras, laptops, impresoras) de los cuales el 87% funciona debidamente. El estudio reporta que en total 30,805 policías trabajan en las comisarías del país.

BAJADO DE  http://peru21.pe/actualidad/cerca-31-mil-policias-laboran-1397-comisarias-peru-2112456

las 4 pandillas mas peligrosas del mundo


El termino Pandilla (gang) comúnmente es un grupo de personas que sienten una relación cercana, o íntima e intensa entre ellos, por lo cual suelen tener una amistad o cercana con ideales o ideología o común entre los miembros; hecho que les lleva a realizar actividades en grupo, que puede ir desde salir de fiesta en grupo hasta realizar actividades violentas.

En Iberoamérica el término "pandilla" suele tener especialmente connotaciones negativas, ya que su uso comúnmente se refiere para indicar a grupos, o tribus urbanas que habitualmente realizan acciones violentas contra otras personas.

Algunas formas de clasificar a una pandilla son las siguientes: pandillas culturales,cuyo fin es únicamente de "honor" y camaradería, y las pandillas industriales cuyos fines son por lo general ilícitos y van desde la violencia, el narcotráfico hasta asesinato y otras actividades más.

Los pandilleros típicamente son jóvenes de entre 13 y 21 años de edad. A la mayoría no le ha ido bien en la escuela y muchos hasta han abandonado sus estudios antes de terminarlos. A menudo tienen familiares que han estado en las pandillas. Usualmente los jóvenes más involucrados en la pandilla tienen historial de estar sin supervisión adulta diariamente por largos periodos de tiempo desde una temprana edad. Estos jóvenes se unen a las pandillas en busca de aceptación, compañía, reconocimiento y el sentimiento de pertenecer.

Creen en la lealtad y la unidad de la pandilla, pero las dejan a un lado cuando su propia seguridad esta en peligro. Portan insignias y/o tatuajes alusivos a la pandilla, tener un lenguaje oral y forma de caminar y comunes. Portan armas blancas o de fuego para su propia protección. Hacen alarde de pertenecer a esa pandilla, y utilizan el graffiti para determinar su territorio o amenazar.(Wikipedia)



Zona: Nairobi, Kenia
Número: 100,000

Descripción: Pertenecen al grupo étnico Kikuyu, el más grande de Kenia. Se dedican a la extorsión a nivel gubernamental y se han convertido en fuerza política.

“Mungiki” en realidad no es sólo una pandilla de delincuentes, sino una auténtica secta que se remite a los “valores tradicionales africanos”. Formada en los años 80"S del siglo pasado, la secta “Mungiki” fue declarada fuera de la ley por las autoridades locales, por estar involucrada en extorsiones y actos de violencia
.

“Los Mungiki, gracias a sus actividades criminales, tienen a disposición notables recursos económicos, con los cuales han logrado conquistar también protección política.


Zona: Sao Paulo, Brasil
Número: 6,000 activos, 140,000 en cárceles

Descripción: Controlan las cárceles de Brasil, secuestro, extorsión, tráfico de drogas.

El Primer Comando Capital también conocido como PCC, es una organización considerada ilegal por el Estado brasileño, compuesta inicialmente para defender los derechos de la masa penitenciaria brasileña, surgida en el inicio de los años noventa en el Centro de Rehabilitación Penitenciaria de Taubaté, para donde eran transferidos prisioneros considerados de alta peligrosidad por las autoridades legales.


El PCC posee su propio estatuto, el llamada Estatuto del PCC, donde están las prescripciones y la razón de ser de esta organización. La organización también es conocida por 15.3.3 porque la letra P ocupa el 15º lugar en el alfabeto portugués (excluyendo la letra K) y la letra C es la tercera en dicho alfabeto.


Zona: Estados Unidos, México, Salvador
Número: 100,000

Descripción: Extorsión, tráfico de drogas. Han crecido en Estados Unidos.

Mara Salvatrucha o MS son nombres con los que se conoce a bandas muy grandes localizadas en Centro América y Estados Unidos, constituidas por una mayoría de salvadoreños, hondureños guatemaltecos y otros centroamericanos. Sostienen células o "clicas" localizadas en Latinoamérica con más de 100,000 miembros.


Las actividades criminales de la Mara Salvatrucha incluyen venta de drogas, extorsión, venta de armas, robo, asesinatos por encargo, etcétera.

Sus actividades en los Estados Unidos atrajeron la atención del FBI que, en 2005, hizo redadas contra los pandilleros donde cayeron 600 miembros de la MS.


La palabra "Mara" en Centroamérica significa "grupo". El término proviene de la palabra "marabunta", a saber, conjunto de gente alborotada y tumultuosa; colonia de hormigas que se alimentan de todo lo que encuentran a su paso. La Mara Salvatrucha, nace en Los Ángeles, Estados Unidos.

La palabra Salvatrucha, se refiere a "salvatrucho" que es el equivalente a sálvate trucho. Trucho es también un equivalente de ponerse "vivo", "estar atento".

Los integrantes de la Mara Salvatrucha suelen hacerse tatuajes con los cuales demuestran su membresía. Aunque los maras actuales ya no suelen tatuarse para no ser detenidos por la policía o para no llamar la atention
.

Zona: Taiwán
Número: 10,000

Descripción: Tráfico de drogas, extorsión, tráfico de personas. Manejan negocios internacionales, desde Estados Unidos hasta Europa y Australia. Se han aliado con tríadas chinas y el Yakuza japonés.

United Bamboo Surgio como la más grande de varias maquinas de asesinatos respaldadas por Pekín durante la toma del comunismo el centro de la China. En 1984, su casería de disidentes los llevo hasta los suburbios de San Francisco donde asesinaron al periodista Chino Americano Henry Liu en su propio garaje. Dos decadas mas tarde, los pandilleros de United Bamboo siguen siendo muy internacionales pero ahora tienen sus manos puestas en "virtualmente cada faceta de la actividad ilegal imaginable," incluyendo el tráfico humano, tráfico de armas, y de drogas, de acuerdo al diario Asia Times.


El tamaño de este tráfico ilegal es solamente agrandado por sus redes obscuras de gran alcance, con conexiones directas a otros grupos ilegales como las Triadas Chinas, el Yakuza Japones, y los miembros activos de pandillas de los Estados Unidos a Europa. La Oficina de Seguridad Nacional de Taiwan hasta cree que el trafico de drogas de United Bambooha alcanzado Corea Del Norte con el apoyo directo del régimen de Kim Jong Il. Una mafia subterránea bien estructurada, United Bamboo y sus trabajos y acciones siempre están bajo el radar.

Pero en mayo del 2005, cuando una procesión de hombres de 10-km aparecieron vistiendo camisetas negras durante el funeral del único lider Hsu Hai-ching (con 93 años, Hsu encontró la muerte al ahogarse con un pedacito de Sushi nigiri sushi), Taipei fue recordada De que United Bamboo y sus compañeros del Yakuza todavía son una fuerza la cual se debe tener en cuenta.





BAJADO DE http://www.taringa.net/posts/imagenes/16242169/las-4-pandillas-mas-peligrosas-del-mundo.html

La violencia juvenil no ocurre en el vacío

Derechos Humanos

Youth violence does not occur in a vacuum
La violencia juvenil no ocurre en el vacío
14 de Enero de 2013


Las familias y la sociedad están omitiendo su obligación de proteger a los adolescentes de manera integral.Los jóvenes que ingresan al Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente han sufrido la vulneración de sus derechos dentro de su propio hogar



El número de adolescentes que ingresaron al Srpa no alcanza a representar ni el uno por ciento de la población menor de 18 años del país estimada por el Dane.
Archivo
Agencia Pandi

Si se busca a un responsable por las infracciones a la ley que cometen los adolescentes, la deducción sería fácil, la familia, primera institución responsable del cuidado, del amor y de la protección no está cumpliendo con sus obligaciones.

La sociedad por su parte también peca por omisión y definitivamente el Estado tiene que entrar a corregir, proteger, ayudar a las familias y atender de manera integral a quienes hayan caído en conflicto con la ley.

De acuerdo con los registros del Icbf, 88.603 adolescentes entraron en proceso judicial desde 2007, cifra que equivale a 17.720 casos por año. Del total de los procesos, 28 por ciento corresponden al delito de microtráfico, el siete por ciento a porte de armas y tan solo el dos por ciento a delitos graves como homicidio.

En otros porcentajes el hurto corresponde al 38 por ciento de los delitos y el once por ciento a otros no clasificados.

Las dos primeras modalidades mencionadas en las que los niños son involucrados y que asciende al 35 por ciento de las capturas, son consideradas por la Organización Internacional del Trabajo como las “peores formas de trabajo infantil”, se supone que detrás de los delitos hay un adulto que los utiliza, por lo que habría que reforzar, definitivamente, la investigación de adultos responsables.

El 35 por ciento de las capturas de adolescentes responde a delitos de adultos que utilizan a los niños. Por lo tanto, el número de capturas anuales se reduciría a 11.518.

Según estadísticas de la Policía, los 28.877 adolescentes aprehendidos entre el 30 de septiembre de 2011 y la misma fecha de 2012 representan el 11.6 por ciento de las 261.147 capturas realizadas por la Institución en el mismo período. Por lo tanto si se trata de endurecer las penas, la medida debería aplicarse a los adultos que utilizan a los adolescentes.

El último informe de la Comisión de Evaluación del Srpa puso en evidencia los retos de este Sistema, que se encarga de regir los procedimientos a seguir con los menores entre 14 y 18 años que incurren en una conducta punible.

En materia de castigos, el documento revela  que todavía no hay pautas para la aplicación de sanciones a las familias, lo cual contradice el principio de corresponsabilidad claramente identificado en el Código de la Infancia y la Adolescencia.

De igual manera, revelan que “los padres o cuidadores de los menores de 14 años no están siendo judicializados por la comisión de delitos graves de acuerdo con el Artículo 142 de la Ley 1098 de 2006”.

El documento también precisa otro punto a fortalecer dentro del Srpa y es la existencia de “dictámenes débiles por parte de los equipos técnicos y débil seguimiento del cumplimiento, y verificación de las sanciones”.

Aumentar las penas no es la salida


Distintas voces políticas y sociales han llegado a reclamar un aumento de penas para los menores de edad, como una medida tendiente a reducir su participación en hechos delictivos.

No obstante, y con numerosos argumentos, los expertos tienen claro que aplicar una medida como esta no es un camino para lograrlo. De hecho, la misma Policía, en su revista criminalística, expone cómo esta medida ha sido tomada en otros países con un desastroso resultado. No bajan los delitos y sí aumenta la reincidencia.

Mario Suescún, abogado, especialista en Derechos de la Niñez, advierte que “ya está demostrado que la medida no disminuye la criminalidad, sería contraria a los instrumentos internacionales de Derechos Humanos suscritos por el Estado colombiano y además perjudicaría notablemente los derechos de la niñez, quitándole el sentido al Código de la Infancia y la Adolescencia”.

El desafío de la prevención


Para el caso colombiano las acciones de prevención, al parecer aún no se concretan.
El abogado Manuel López, consultor en temas de niñez y adolescencia,  asegura que las familias y las instituciones educativas cumplen un papel  “mediocre”, tanto en la prevención como en la atención de los adolescentes que tienen problemas con la Ley o que enfrentan el riesgo de tenerlos.

Para el jurista, el asunto es que aún no se han atendido con vehemencia aquellos factores individuales, familiares y sociales que llevan a un adolescente a delinquir.

 “Fenómenos como el narcotráfico, la violencia urbana y el conflicto armado han ido involucrando a los adolescentes y por ello es necesario que el Estado penalice a los adultos que utilizan a menores de edad en estas conductas” exige.

Los derechos de los adolescentes que cumplen penas de reclusión en los centros especializados se han visto vulnerados de diversas formas. Es por eso que la falta de oportunidades y el deseo de venganza aparecen entre los factores que llevan a un menor de edad a delinquir.

La designación de roles para el buen desarrollo del Srpa es de vital importancia si se busca cumplir con el objetivo de lograr un proceso pedagógico que impulse la reducción en el número de menores de edad que inciden en un hecho delictivo.


Los retos del Sistema


Algunas falencias no han permitido el pleno y adecuado funcionamiento del Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes.

Por ejemplo, la ausencia de un ente rector que se encargue de convocar, coordinar y articular el Sistema lo que representa un vacío legal que existe desde la misma creación del Srpa.

Otro de los puntos críticos que resalta la evaluación es la falta de recursos económicos dispuestos para las necesidades del Sistema. El documento asegura que no existe una disposición que aclare de dónde debe salir el dinero requerido.

La evaluación realizada por los integrantes de la Comisión de Evaluación del Srpa reveló que "los jueces recurren a imponer la privación de la libertad en centros especializados cerrados en los que haya cupo disponible o a entregar a los adolescentes a sus familias por carecer de la oferta institucional requerida para la operación del Srpa".

Según la Comisión, aún hacen falta funcionarios especializados en derechos de la niñez, la adolescencia y la justicia restaurativa, hace que sea más difícil el cumplimiento adecuado de los procesos que se manejan dentro del Sistema.

La prevención del delito está en la garantía integral de los derechos de los NNA que gocen plenamente de sus derechos, que tengan una escuela afectiva, incluyente y de calidad, que tengan salud, alimentación y amor en sus hogares, son niños y niñas que están blindados frente a la violencia.

Es necesaria también la articulación de alcaldes, gobernadores y todos los encargados de los organismos que componen al Srpa para que intervengan de manera coherente y concertada para que se garantice la justicia restaurativa, la verdad y la reparación del daño.

BAJADO DE  http://www.elmundo.com/portal/noticias/derechos_humanos/la_violencia_juvenil_no_ocurre_en_el_vacio.php